Es nuestra trayectoria y tradición como organismo particular, lo que nos ha permitido aprender y capitalizar experiencias y, de este modo, responder a las problemáticas del delito y la inseguridad en las distintas épocas de nuestra nación por las que hemos transitado; y, es nuestro compromiso realizar la tarea con calidad, inspirados en los principios de ética y moral que involucra, conscientes del valor público que debemos y ansiamos generar en beneficio del país.
Hemos pasado por momentos difíciles, la década de 1990 fue compleja, con recursos limitados y baja confianza ciudadana. Pero con el esfuerzo de todos, con la voluntad inquebrantable de resguardar nuestra historia y tradición, salimos adelante. Los planes estratégicos de desarrollo institucional, Fénix I y II fueron reflejo de ello. Consagraron el renacer de la Policía Civil, así como la confianza demostrada por las autoridades y la ciudadanía. Respondimos con lo mejor que sabemos hacer: trabajar de manera comprometida por la seguridad y el bienestar de la sociedad, atributos que nos han convertido en un actor protagónico de la historia republicana reciente.