Entre el 12 de marzo y el 2 de abril de este año, la PDI fue parte de la novena versión de la “Operación Trigger”. Con el propósito de incautar armas de fuego ilícitas que estén siendo usadas en todo tipo de ilícitos, este es el mayor procedimiento de su tipo coordinado por INTERPOL en América Central y del Sur.

El rol que cumplió la PDI en esta operación internacional permitió incautar, de manera inédita en nuestro país, una impresora 3D para la fabricación de armas de fuego, además de detener a los autores de los delitos, e incautar droga y armamento y munición balística.

Además de coordinar las operaciones realizadas en Chile, la Brigada Investigadora del Crimen Organizado (Brico) estuvo a cargo de concentrar las cifras e información relevante. De este modo, el balance realizado por la unidad especializada menciona que se detuvo a 41 personas, y se incautaron 91 armas de fuego, además de 242 municiones balísticas de diversos calibres. Entre los resultados destaca el decomiso, inédito, de una impresora 3D y piezas de armas confeccionadas con esta.

En cuanto a metodologías de trabajo, se aprovecharon las herramientas que INTERPOL tiene a disposición para estos fines,  como el Sistema de Gestión de Registro y Rastreo de Armas Ilícitas (iARMS), una base de datos global de armas de fuego ilícitas, que incluye aquellas que han sido robadas, perdidas y traficadas o contrabandeadas.

Por tanto,  tras estos resultados se encuentran la experiencia de 90 años en la escena del crimen de la PDI y el siglo que cumple INTERPOL trabajando por la conexión policial para hacer del mundo un lugar más seguro y lograr aplicar estrategias policiales efectivas frente a fenómenos complejos y transnacionales.