Esta mañana, el Gobierno Regional de Santiago entregó oficialmente 2 vehículos que serán utilizados por la Brigada de Reacción Táctica Metropolitana (BRTM) en su función de brindar seguridad y protección en operaciones policiales de alto riesgo.

Los vehículos, que se suman al parque automotor de esta unidad especializada, son dos Ford F-550, Testudo con capacidad para 10 operadores tácticos, un blindaje integral nivel 6 que brinda protección contra armas automáticas y un piso dotado de protección contra explosiones. Su carrocería es monobloque y está construida con acero de grado balístico.

Su adquisición fue posible gracias al financiamiento del Gobierno regional que aportó un total de $575.664.000. Tras el proceso de licitación pública, este miércoles 27 de febrero se llevó a cabo, en la Escuela de Investigaciones Policiales, la ceremonia oficial de entrega, encabezada por el Director General, Héctor Espinosa y la intendenta Karla Rubilar.

La máxima autoridad de la Policía Civil agradeció a la intendenta y al Gobierno Regional de Santiago “porque son recursos que vienen a fortalecer lo que estamos haciendo. Tenemos una meta clara que es la investigación, pero también debemos hacer allanamientos para detener a peligrosos criminales, y son procedimientos bastante complejos, donde esto (los blindados) entrega seguridad y protección a  nuestros detectives.”- señaló.

Por su parte, la intendenta destacó que esta inversión “pone a Chile liderando el combate al narcotráfico. Estamos hablando de unos vehículos que otorgan la tecnología y seguridad necesaria para poder hacer allanamientos y combatir de mejor manera el flagelo que es la droga y los narcotraficantes presentes en nuestras poblaciones “.

La BRTM es el órgano técnico y especializado de apoyo a la labor operativa, que da respuesta táctica a los eventos críticos de alto riesgo, brindando seguridad y protección en determinadas actuaciones policiales. Entre sus principales funciones se encuentran las de ejecutar órdenes de entrada y registro (allanamientos), prestar seguridad perimetral en diligencias policiales y desarrollar operaciones contra terroristas y delincuentes de alta peligrosidad.

Durante el año 2018, realizó un total de 305 operaciones debidamente planificadas, irrumpiendo en 376 inmuebles principalmente de la Región Metropolitana. Estos procedimientos se asocian en un 59% a delitos contemplados en la Ley 20.000 (sobre tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas),  que, por lo general,  interactúan con otros ilícitos, como infracción a la Ley de Armas e incluso homicidios.  En lo que va del presente año, ha concretado la irrupción en 36 domicilios.